Un vino amante del sol, dulce, potente y de colores vivos granates característicos de la variedad Monastrell. Los aromas de frutillos rojos silvestres, aparecen a borbotones como si emanaran de la misma tierra, que junto a un marcado carácter floral, convierten a EYA en un sinuoso perfume que culmina con frescura y ricas sensaciones en boca.
Tal como sucedía históricamente en muchas familias de Jumilla, la familia Carchelo, ya en el siglo pasado, transformaba la uva de sus viñedos en aquellos vinos antaño característicos de esta tierra, de gran cuerpo, potente color y alto grado alcohólico. Casi tres generaciones después, retoman sus orígenes y vuelven a hacer lo mismo; ahora con otros medios y tecnologías; vuelven a ser gente de campo.
Bodegas Carchelo, S. L., fundada en 1990, se asienta en Jumilla (Murcia), a los pies de la Sierra del Carche, Parque Regional protegido cuyo pico más alto “Madama” se eleva a 1.372 metros. El Mediterráneo, unido a su ubicación interior y en meseta les procura una climatología singular. Humedad relativa media anual de 60 %, 3.000 horas de sol al año, altitudes que van desde los 485 m en su casco urbano hasta los 1.372 m en su punto más alto y muy baja pluviometría, con años que no superan los 20 días de lluvia.
En el mediterráneo español, entre las provincias de Alicante, Albacete (La Mancha), Granada y Almería (Andalucía) se encuentra la Región de Murcia, y al noreste de ésta se sitúa Jumilla, ciudad histórica, milenaria; un extenso término municipal (1.000 km2) conforma el altiplano de la Región de Murcia con una altitud media de 600 m. Tierra árida y montañosa, de estepa y romeros, donde el viñedo encontró históricamente un singular hábitat para producir uvas de calidad excepcional.
En palabras de Lorenzo Abellán (Director General):
“Apunta alto aunque difícilmente llegues; pero si apuntas medio o bajo puede que no llegues a ningún sitio. Apuntamos a situar CARCHELO entre los cien mejores vinos del mundo que no entre los mil más caros. Materia prima, medios técnicos y profesión tenemos para lograrlo; Ilusión y tesón nunca se nos acabarán y la continuidad de nuestra empresa familiar está garantizada, al menos, para tres generaciones.”
Ética profesional, respeto a las personas y a su entorno son constantes en cualquier área de su actividad
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